
El Dragón de la Gula
En la mitología interior, la Gula toma forma de un dragón insaciable. Nunca se sacia: devora comida, experiencias y placeres sin medida. Su fuego no destruye, pero vacía.
Los efectos:
La Gula arrastra al cuerpo al exceso: pesadez, desgano, enfermedades. También nubla la mente con la ansiedad de «más».
El antídoto:
La práctica de la moderación consciente: aprender a saborear despacio, agradecer antes de tomar.
Amar a la sombra:
El dragón no es tu enemigo: nació de tu deseo profundo de plenitud. «Gracias por recordarme que estoy vivo. No necesito más, solo lo suficiente».


